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Desapariciones en México, crimen de Estado por omisión: Santiago Corcuera

El ex presidente del Comité de la ONU contra las Desapariciones Forzadas afirma que el Estado mexicano es responsable de las ausencias, incluso cuando las cometen particulares, por permitirlas o no prevenirlas.

Las desapariciones forzadas en México, incluso si son ejecutadas por particulares, deben considerarse crímenes de Estado, ya que ocurren con la tolerancia o consentimiento de las autoridades, afirmó Santiago Corcuera, ex presidente del Comité de la ONU contra las Desapariciones Forzadas (2016-2017).

"Stricto sensu, la desaparición forzada es siempre un crimen de Estado", sostuvo el académico durante un conversatorio con Sergio Aguayo en El Colegio de México, en respuesta a las declaraciones de la Presidenta Claudia Sheinbaum, quien ha rechazado que el Estado esté implicado en estos casos.

Corcuera citó el artículo 2 de la Convención Internacional para la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas, el cual establece que este delito puede ser cometido también por personas que actúan con apoyo, autorización o aquiescencia del Estado.

Como ejemplo, mencionó el caso del campo de entrenamiento criminal hallado en Teuchitán, Jalisco, donde ya se había realizado un cateo previo por parte de las autoridades, sin que se diera seguimiento a las investigaciones.

"Cuando el Estado acepta, tolera, o conscientemente no hace nada para impedir estos hechos, está creando las condiciones para que ocurran las desapariciones", concluyó.